Sedus y la sostenibilidad (entrevista con Simon Roquette)
La sostenibilidad y su gestión son más importantes que nunca, especialmente en los últimos años. En primer lugar, por el propio afán de conservar los recursos y, por lo tanto, respetar el medio ambiente y, en segundo lugar, porque las normas de protección medioambiental son cada vez más estrictas y son objeto de una atención cada vez mayor. Simon Roquette, responsable de medio ambiente de Sedus, explica en una entrevista cómo se está posicionando la empresa, qué medidas se están aplicando ya hoy y cuáles son los objetivos para el futuro.
Pregunta: Para empezar, una cuestión de carácter general. ¿Cómo aborda Sedus los temas de la sostenibilidad y la protección del medio ambiente?
La sostenibilidad es un asunto fundamental para Sedus desde su fundación. Christof Stoll se preocupó intensamente por este tema ya en la década de los 70, algo ciertamente excepcional en aquel momento. Hemos conservado su actitud y su preocupación por el futuro hasta el día de hoy. Por un lado, a través de las fundaciones y, por otro lado, mediante el anclaje de todo lo relacionado con la sostenibilidad en la totalidad de nuestros procesos.
Pregunta: ¿Qué papel desempeña el factor «Made in Germany»?
Alemania es un país líder en lo que respecta a leyes, directrices y certificaciones medioambientales. En este sentido, estamos en contacto permanente con las autoridades locales y las asociaciones profesionales correspondientes. Aunque esto nos supone un gran esfuerzo como empresa, nos da la seguridad de hacer las cosas de forma correcta y responsable. Un ejemplo son nuestras instalaciones de galvanoplastia. Sí, manejamos productos químicos peligrosos. Pero lo cierto es que utilizamos personal especialmente cualificado, sometemos todo el proceso a una estricta vigilancia e invertimos regularmente en esta planta para mantenerla a la última. En mi opinión, esta es la mejor manera de proceder y no limitarnos a subcontratar este proceso a un país con normas medioambientales menos exigentes.
En lo referente a las compras y adquisiciones, tratamos en todo momento de reducir al mínimo indispensable las distancias de transporte, lo que implica apostar por materiales de producción local. Así pues, nuestro país proveedor más importante es Alemania, con una cuota de compras de alrededor del 75 por ciento, complementado mediante proveedores de Italia y Suiza, en los casos en que estos están más cerca que los de Alemania. Si utilizamos proveedores cuya legislación medioambiental difiere de la de Alemania, inspeccionamos sus centros de producción y nos cercioramos de obtener la información pertinente. Además, apoyamos y exigimos a estos proveedores que actúen por su parte de forma sostenible. Tener una visión general de la cadena de suministro será cada vez más importante. Por ejemplo, con nuestra certificación de silvicultura sostenible podemos rastrear la cadena de suministro hasta el lugar de la tala. De esta manera podemos garantizar la no circulación de madera de tala ilegal. La crisis actual ha venido a demostrar lo importante que son para las empresas las cadenas de suministro claras y cortas.
Además, el sello «Made in Germany» no solo hace referencia a la calidad, sino también a nuestro compromiso con Alemania como lugar de producción. Un compromiso que se ha corroborado recientemente con nuestra importante inversión en las plantas de producción en Dogern y Geseke.
Pregunta: Hablando de inversiones importantes: ¿No suponen las intervenciones de modernización sostenibles grandes sumas de dinero para la empresa?
Es cierto. Por ejemplo, la conversión de la planta de galvanoplastia costó alrededor de 7,5 millones de euros en 2010 y las obras de nuestra Smart Office también han supuesto una gran inversión. Sin embargo, Sedus no considera la sostenibilidad de forma aislada: una planta más moderna a menudo conlleva un aumento de la eficiencia, un menor consumo de energía y materiales y una mayor seguridad para los empleados que la operan. El aumento de los precios de la energía naturalmente desempeña un papel en este sentido. Por lo tanto, es un dinero bien invertido para el presente y para el futuro. La palabra clave es «previsión».
Pregunta: La sostenibilidad no es algo que se finiquite en algún momento, sino más bien un proceso permanente. ¿Cuáles son los planes de Sedus para el futuro próximo?
Nos hemos fijado el objetivo de ser neutrales en carbono para el 2025. Es, sin duda, un gran desafío. Sobre todo porque hemos decidido no conseguirlo intercambiando certificados. Con este fin, nos hemos comprometido a mejorar aún más los conceptos energéticos de nuestros emplazamientos. En 2019 también elaboramos fichas ecológicas para nuestros productos (la huella ecológica de un producto durante su ciclo de vida). Esto nos proporciona la información que necesitamos para descubrir posibles soluciones y así mejorar aún más el impacto ambiental de nuestros productos. El uso de materiales reciclados debería contribuir significativamente en este sentido. En el futuro, emplearemos en nuestros productos cada vez más plásticos reciclados convencionales, de esos que echamos a los contenedores amarillos. El objetivo a largo plazo es la apuesta por una economía del reciclaje. Esto permitirá reducir al mínimo la utilización de recursos y la cantidad de desechos.
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