Teletrabajo: cómo optimizar la oficina en casa

Para algunas personas el teletrabajo ya era una realidad antes del confinamiento, para otras la «oficina en casa» es toda una novedad. Sin embargo, para todos es importante que el espacio de trabajo en casa sea un espacio de bienestar. Porque solo así se puede trabajar de forma concentrada, eficiente y productiva. En este sentido, la armonía del mobiliario y el espacio y su ergonomía tienen una influencia decisiva.

¿Qué hay que tener en cuenta cuando se pasa de la oficina normal a la oficina en casa? ¿Qué facilita trabajar desde casa? ¿Y qué hay que evitar? A continuación, algunos trucos y consejos para crear fácilmente un espacio de trabajo en casa y que le ayudarán a convertirla en un espacio de productividad. > En casa, lo primero y más importante es separar físicamente el trabajo y el hogar. Si se dispone de espacio suficiente, es aconsejable destinar una habitación como espacio de trabajo. Esto permite desconectar del trabajo tanto física como mentalmente una vez finalizada la jornada. No es aconsejable poner el despacho en el dormitorio, por ejemplo, porque la calidad del sueño puede verse afectada.

> ¿Lo principal es que sea acogedor y cómodo? Aunque parezcan tentadores, el sofá, el sillón y la cama no son buenos lugares para trabajar. Por un lado, puede resentirse la mentalización; por otro lado, la postura no es óptima. Lo mejor es tener una mesa propia y una silla adecuada. Los muebles ergonómicos están diseñados para evitar problemas de postura cuando se trabaja con una pantalla de ordenador y para garantizar el máximo confort y apoyo al sentarse.

> No todo se archiva y se almacena digitalmente, algunos documentos todavía siguen siendo «analógicos». Por lo tanto, puede ser útil dedicar una esquinita de la oficina en casa al almacenamiento. Esto facilitará mantener las cosas ordenadas y garantizará un puesto de trabajo bien organizado donde todo esté al alcance de la mano.

> Luz y bienestar: las condiciones de iluminación también desempeñan un papel importante en la elección del espacio de trabajo. Cerca de una ventana habrá mucha luz natural , así como la opción de ventilar con aire fresco (algo especialmente necesario en estancias pequeñas). Sin embargo, si el espacio es muy oscuro, se puede usar una lámpara si es necesario.

> Para que todo marche como un reloj: cuando la tecnología funciona sin problemas, la actividad diaria y el intercambio con los colegas también funcionarán bien. Vale la pena hacer una rápida comprobación: ¿Hay suficientes enchufes en los alrededores? ¿Funciona el teléfono? ¿El router está lo suficientemente cerca para mantener una conexión estable a Internet?

> Aparte de la funcionalidad, tampoco debe descuidarse el ambiente. Aquí nos vendrán bien plantas, fotos o postales. Le dan un toque personal al espacio de trabajo y generan una sensación de bienestar. Está todo permitido, ¡siempre y cuando quede espacio suficiente para trabajar!

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